Piérdete...conmigo, Anna García

Título: Piérdete... conmigo
Autora: Anna García
Género: romántica contemporánea
Editorial: Harper Collins, Top Novel
Sinopsis:
Degustar un Mai Tai al borde de la playa desde una hamaca de tu villa privada.
Atragantarte con un chupito de algo desconocido en la barra del bar más destartalado.
Viajar con lujosas maletas Louis Vuitton o cargando con una enorme mochila llena de parches.
Los viajes de Emma y los de Finn son completamente opuestos, pero los dos triunfan con sus programas viajeros de TV en la misma cadena. Una, viviendo a todo trapo, el otro, buscando los rincones más desconocidos. No pueden ser más opuestos, y difícilmente van a coincidir, aunque estén en la misma ciudad grabando. Salvo que el destino, y las audiencias, pueden decidir otra cosa.
A algún directivo con un extraño sentido del humor se le ocurre proponerles que trabajen juntos en un mismo programa. ¿Un greñas mochilero en el restaurante del chef más reputado de Francia rodeado de clientes trajeados? ¿Una exquisita mujer luciendo sus Manolos en la barra de un sucio garito lleno de sorprendidos y ruidosos clientes en chanclas? Solo pueden saltar chispas...

Los viajes que han realizado Emma y Finn para sus respectivos programas no pueden haber sido más diferentes, pero te aseguro que siguiendo a esta pareja televisiva en su nuevo proyecto, te vas a enamorar de ellos y de todos los lugares que visitan. Dos personas totalmente opuestas que estan "condenadas" a trabajar juntas, pero quizá esa distancia esté solo en sus cabezas, porque resultan ser mucho más cercanos de lo que esperaban. Ha sido una lectura agradable, con momentos divertidos, y donde un flechazo que quieren esconder va cambiando sus respectivas perspectivas. Desde Camboya a París pasando por Hawai o Tanzania entre otros destinos de ensueño, haz la maleta literaria y ¡déjate llevar por Emma y Finn!

Emma visita enclaves idílicos donde prioriza enseñar las comodidades que puede ofrecer un resort de lujo antes que pasear por las calles de los lugares que visita o mezclarse con sus gentes y obliga a su cámara, Stu, a repetir incansablemente plano tras plano hasta que está satisfecha con cómo sale en ellos. Esta joven neoyorkina ha vivido, y sigue haciéndolo, en un ambiente protegido y con todas las comodidades, sin embargo, no haber seguido los pasos de su padre en la abogacía le hacen ser el elemento algo apartado de su familia.

Un email del productor de la cadena le hace temer por su puesto de trabajo porque aunque no sienta una pasión desmedida por este, tiene claro que no quiere perder esa independencia económica que tanto le ha costado conseguir. Lo que no se imagina es que tendrá que compartir plano con un hombre que es totalmente opuesto a ella en todo.

Finn es la definición de espíritu libre; él y su hermano han sido criados por su abuelo después de la trágica muerte de sus padres y han conformado un núcleo unido que siempre le ha apoyado en sus aventuras por el mundo; su programa de viajes se adentra en las comunidades, en los lugares más especiales, todo ello con una mochila al hombro y una pequeña cámara GoPro que él mismo maneja; cuando regresa a Nueva York es solo de paso porque tiene claro que no quiere establecerse en ningún lugar, que le quedan muchos sitios que visitar.

Un email del productor de la cadena hace que piense que su trabajo está en peligro, aunque si bien es toda una oportunidad que le paguen por hacer algo que le apasiona, tiene claro que se buscará la vida si esta etapa se acaba. Lo que no se imagina es que tendrá que compartir plano con una mujer que dará un giro completo a su mundo y le hará plantearse cosas que nunca pensó que querría.

¿Cuál es el proyecto? Viajar juntos a los destinos que la cadena elija con un presupuesto limitado y con Stu como cámara. De aquí solo pueden salir situaciones divertidas porque imagínate, Emma tendrá que transigir para dormir en sitios, digamos, humildes, y comer en restaurantes que quizá no hubieran pasado antes sus estándares de calidad y Finn tendrá que viajar, pro primera vez, en compañía y tener en cuanta otras opiniones a la hora de moverse por los países que visiten.

Lo que más me ha gustado de esta historia es cómo te haces una imagen de cómo son ellos y cómo te sorprenden porque lo que ocultan a todos, incluso a sí mismos, va saliendo a la luz con cada kilómetro recorrido, se replantean su vida, sus decisiones y los pasos que quieren dar y, por supuesto, el miedo, ese temor a que el otro no sienta lo mismo que les paraliza y produce esos malentendidos que tanto juego dan.

Stu, un maravilloso secundario, es testigo de los avances y retorcesos, de las miradas y los momentos especiales y se pregunta cómo es que ellos mismos no quieren verlos. Emma tendrá en su amiga Kat a su propia confidente, así como Finn tendrá a su hermano y su abuelo, un auténtico personaje que no le deja pasar ni una para que espabile de una vez.

Como te decía al principio, los viajes de los protagonistas son de ensueño, una auténtica guía por esos lugares que querrás visitar sí o sí y una progresión en la relación bonita, ilusionante, con unos sentimientos que surgen rápido y que se afianzan por la cercanía casi sin ellos quererlo. Atenta a los títulos de cada capítulo, elegidos con acierto y toda una decalración de intenciones. Un final épico y unos epílogos fantásticos. Este verano, piérdete con Emma y Finn.