Autor: Mariana Zapata
Género: romántica contemporánea
Editorial: Plaza y Janés
Si alguien le pidiera a Jasmine Santos que describiera la última época de su vida con una sola palabra, seguramente utilizaría una que habría que censurar.
Después de años de dedicación e incontables huesos y compromisos rotos, sabe que su oportunidad para dedicarse profesionalmente al patinaje artístico está esfumándose. Sin embargo, cuando la oferta que tanto estaba esperando por fin llega, lo hace de la mano de un idiota arrogante que es, además, su némesis.
Pero tal vez haya llegado el momento de que Jasmine reconsidere muchas cosas...
Entre ellas, a Ivan Lukov.
Como siempre que un libro me ha gustado mucho, mucho, muchísimo, parece que todas las palabras se van a quedar cortas, querría contarlo todo, pero tampoco puedo y transmitir todos las emociones en unas pocas líneas y es, no hay que engañarse, complicado. Pero sí puedo decir alto y claro que Jasmine, la protagonsita de este libro es EXCEPCIONAL. Ya sé que Ivan Lukov, como buen protagonista de historia intensa, se lleva muchos de los honores, pero, de verdad, si me tengo que quedar solo con un personaje, me quedo con ella porque es fuerte, vulnerable, luchadora, incansable en su esfuerzo y la mejor hija y hermana porque se esfuerza cada día por que sus allegados sepan que son importantes. Dicho todo esto, prepárate para fangirlear de esta historia durante mucho tiempo!!
Esta novela gira en torno al patinaje artístico, una disciplina complicada y completísima, que exige a los y las patinadoras, si quieren formar parte de la élite, que estén dispuestos a sacrificar todo lo que sea necesario. En esas está Jasmine Santos porque toda su vida ha respirado patinaje desde que vio una película de hockey hielo (que sí, confieso que a mí también me tuvo obsesionada en su momento), pero los resultados no siempre le han acompañado, y menos desde que pasó de la categoría júnior a la sénior. Su trabajo a media jornada le permite entrenar en el complejo propiedad de la familia de su mejor amiga, pero actualemente está sin pareja desde que Paul decidió que le iría mejor patinando con otra, pero cuando le ponen delante una oferta irrechazable, comenzará a pensar que ha llegado su momento y que todos los sacrificios habrán servido para algo.
Toda la novela está contada en primera persona desde el punto de vista de Jasmine, por lo que solo ves algunos otros puntos de vista, por ejemplo el de su madre o hermanos, incluso el de Ivan, en los momentos precisos, pero aún así, poco a poco te vas formando una imagen completa no solo de cómo se percibe ella, si no de cómo la ven los demás, porque aunque ella sea muy crítica consigo misma, es un ser de luz que ayuda a quien lo necesita y está cuando la necesitan.
Ivan Lukov es el hermano mayor de la mejor amiga de Jasmine y está en lo más alto de los patinadores artísticos. Siempre ha sido muy bueno y lo ha ganado todo, y para la siguiente temporada, hasta que pueda volver con su compañera, le propone a Jasmine que patinen y compitan juntos. ¿El problema? Nunca se han soportado... o eso es lo que da a entender Jasmine porque aunque se contestan el uno al otra con salidas que te arrancan una carcajada, cuando tienen que ser empáticos con el otro, son magníficos. Muchas horas de entrenamiento, una sesión de fotos, y el inevitable conocimiento el uno del otro más allá del hielo es lo que va a ir marcando el desarrollo de esta relación tan a fuego lento que cuando estalla es una supernova.
Me ha gustado mucho que no sean prácticamente adolescentes, él tiene 30 y ella 26. Son deportistas que llevan muchísimos años trabajando, tienen experiencia en todos los aspectos y lo dan todo por su disciplina. La parte de las relaciones familiares de Jasmine es magia, cómo interactúa con su madre, sus cuatro hermanos y sus familias y con su padre, la figura que ha estado ausente toda su vida pero ha dejado, aún así, una huella dolorosa con la que ha tenido que crecer. La sensación que he tenido con esta historia es que ha ido de menos a más porque si bien la primera mitad me parecía que avanzaba con paso lento, a partir de la segunda mitad es una vorágine de pasar cosas, giros por todos lados, emociones descontroladas... En definitiva, unas expectativas más que cumplidas.
¿Qué estarías dispuesta a sacrificar por cumplir tus sueños? ¿Qué consecuencias tiene que tuvieras un perfil público por tu trabajo que afectara a tu vida privada? ¿Qué ocurriría si todo por lo que has luchado se queda en humo? ¿Hay plan B? ¿Cómo hacer entender a tu familia que son importantes si no tienes ni un minuto de respiro? Jasmine afronta todas estas cuestiones y muchísimas más en 440 páginas que no puedes dejar de leer y a la vez no quieres que acabe nunca. Y, para terminar, la siguiente conclusión a la que llegas tras terminar el libro y adorar a Jasmine e Ivan es que necesitas leer absolutamente todo lo que escriba la autora.
Hola :)
ResponderEliminarHoy coincidimos en reseña. Aunque es un libro que puedo calificar de recomendable, tengo que admitir que, en parte, me ha decepcionado. Eso sí, la autora me encanta.
Besos
¡Hola! No hago más que escuchar maravillas de este libro y una así nunca termina con su lista de pendientes... Me lo llevo apuntado. ¡Me alegro que te haya gustado tanto! Muchas gracias por tu reseña.
ResponderEliminarNos vemos entre páginas
La vida de mi silencio
Hola guapi!!
ResponderEliminarNo paro de ver este libro en todos lados!. He visto opiniones dispares, me alegro que te haya gustado :) A mi no me termina de llamar mucho.
Muchas gracias por la reseña, un besiin!
artisticrolling.com
ResponderEliminar¡Excelente publicación! Es genial ver cómo la autora ha ambientado esto en un deporte tan excepcional como el patinaje artístico. Este deporte ofrece numerosos beneficios, pero es crucial contar con un equipo adecuado para evitar posibles lesiones. Seguramente la escritora tiene un gran conocimiento al respecto.